Arte

Una fotógrafa crea sus retratos familiares basándose en clásicos de la novela fantástica

Si tiramos de recuerdos y hacemos acopio de esos retratos de familia que todos guardamos como un tesoro, no podremos evitar reconocer que, en la mayoría de los casos, lo kistch predominaba en el conjunto.

No todos tuvimos la suerte de tener la madre que esta familia tiene, una madre apasionada de la fotografía, el Photoshop, las novelas fantásticas y la magia, esa que ella emplea en cada uno de los geniales retratos familiares que realiza.

El marido y los tres hijos de la artista conocida como Alexandria´s Lens, son los modelos de las imágenes en las que esta creativa mezcla realidad y fantasía que añade mediante el tratamiento digital que sigue a cada captura.

Inspirándose en los cuentos de hadas, Alexandria incluye elementos de historias icónicas en su trabajo; a pesar del evidente aire familiar y hogareño, cada una de sus imágenes tiene un punto de vista que se siente especial.

Alexandria y su hija, por ejemplo recorren un campo de hongos más grandes que la vida al estilo de «Alicia en el país de las maravillas»; la escena incluye un conejito blanco y orugas sobre las setas.

Harry Potter es otra gran influencia; como ella misma declara, «La obsesión de nuestra familia con Harry Potter me impulsó a experimentar también porque quería mostrar la magia de una manera diferente dentro de mis retratos».

Las varitas mágicas o los colores de Gryffindor son motivos recurrentes en el trabajo de Alexandria, incluso su hija mayor es Hermione en muchos retratos y, uno de sus pequeños, una versión bebé de Harry.

Alexandria cuenta sobre su proceso de aprendizaje, «Tomé algunos cursos y recibí un título de artes en fotografía cuando mi primera hija, Emma, era una niña pequeña».

«Los cursos me ayudaron a aprender todos los aspectos técnicos de la fotografía, cómo disparar en manual, cómo imprimir y las reglas generales, pero no me ayudaron mucho en términos de creatividad; la creatividad fluyó una vez que aprendí los aspectos técnicos». 

«Aprendí los conceptos básicos de Photoshop al principio de mi carrera fotográfica, pero no comencé a experimentar con efectos mágicos de postproducción hasta hace un par de años […] quería crear más magia, lo que me hizo sumergirme en Photoshop mucho más».

Según cuenta la fotógrafa, una sesión comienza con un «cuaderno de ideas» y, a partir de ahí, decide qué accesorios y atuendos llevar para las diferentes ideas que quiere fotografiar; luego cargan con todo y, a veces, tienen una idea clara de la localización, y otras se dejan llevar.

«A los niños les encanta estar en la naturaleza, por lo que las sesiones son su parte favorita».

Alexandria trabaja en las ediciones de noche cuando la tranquilidad y el silencio dejan que la magia fluya para que dé como resultado esta fantástica galería de retratos que permanecerán siempre en su memoria.

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