«La casa del sol», una edificación para celebrar el horizonte mediterráneo español
El Mediterráneo –y la luces y sombras que proyecta– es pura magia para el alma. Vivir bajo el cobijo de este mar es un privilegio, un sueño.
En Fran Silvestre Aquitectos reconocen que siempre les ha fascinado la obra de Andreu Alfaro “La puerta del Universo” realizada en 1983. Una circunferencia girada y suspendida sobre un cuadrado. Durante algunos años estuvo situada en la puerta su nuestro estudio, y era sorprendente su capacidad para hacerles reflexionar, ubicarnos en la base cuando terminaba el día y pensar que efectivamente se encotraban ante un umbral que les abría la puerta a un espacio infinito.
Un efecto análogo se siente al visitar el “ Elogio del Horizonte IV” realizada por Eduardo Chillida en 1989 en Gijón. Donde según el propio autor se pone al espectador en relación directa con la obra y con el Universo. El propio Chillida se preguntaba “¿No será el presente, como el horizonte, otra frontera, otro límite, otro lugar sin dimensión lleno siempre de preguntas?”
Esta idea de centralidad abierta, como representación de algo inabarcable ha fascinado a la humanidad desde siempre y la arquitectura se ha hecho eco innumerables veces de esta fascinación.
Con estas referencias rondando continuamente en las mentes de los arquitectos apareció un lugar ubicado en la ciudad de Marbella, en una parcela de gran desnivel y a una cota elevada que le proporciona unas vistas fantásticas. El lugar parecería idóneo para situar un observatorio astronómico, pero el programa que se propone es el de una casa.
Plantearon abrazar con una circunferencia un espacio abierto al cielo y al horizonte, y simultáneamente protegido de las miradas ajenas y los potentes vientos de la zona.
Las estancias del nivel superior se abren controladamente hacia hitos concretos del paisaje, mientras que la zona pública disfruta de la relación con el espacio principal y abierto. Quizás de esta manera podamos vivir de forma cotidiana en este espacio que siempre nos cautivó, un lugar en el que se ponen de manifiesto lo que siendo patente en la naturaleza es difícil o imposible alcanzar.
Un lugar ubicado en la ciudad de Marbella, en una parcela de gran desnivel y a una cota elevada que le proporciona unas vistas fantásticas. Planteamos abrazar con una circunferencia un espacio abierto al cielo y al horizonte, y simultáneamente protegido de las miradas ajenas y los potentes vientos de la zona.
