‘Tecla’, la primera casa impresa con arcilla en 3D
Las funcionalidades de las impresoras 3D se han aplicado a cientos de campos distintos: en la ingeniería, el urbanismo, la moda… e incluso en la medicina, donde pudimos comprobar como los respiradores impresos nos ayudaron a combatir el coronavirus.
Cada vez son más los que se atreven a implementar en la creación sus proyectos esta nueva tecnología exprimiendo su potencial al máximo. Se trata de una herramienta en plena expansión que con el ingenio de grandes profesionales puede ofrecer resultados espectaculares.
Un ejemplo de innovación en impresión 3D es el diseño del estudio de arquitectos Mario Cucinella en colaboración con la empresa de impresión WASP. Juntos han edificado el primer modelo de vivienda ecosostenible impreso en 3D en su totalidad a partir de arcilla local.
Inspirado metafóricamente en una de las ciudades invisibles de Italo Calvino, la ciudad en continua construcción. El nombre TECLA es también la conjunción de tecnología y arcilla (clay en inglés) evoca el fuerte vínculo entre el pasado y el futuro al combinar la materia y el espíritu de las antiguas casas atemporales con el mundo de la producción tecnológica del siglo XXI.
Ubicada en Massa, en la región italiana de Lombarda, la casa se compone de dos cúpulas entrelazadas y cuenta con un área de estar de espacio abierto y un espacio de dormitorio equipado con un pequeño inodoro. En el exterior, un pequeño lago recoge los desechos y las aguas de lluvia para reutilizarlos en el jardín, mientras que otra celda con paneles solares y térmicos proporciona energía limpia a la estructura y, por lo tanto, puede convertirla en una casa completamente aislada.
Además es un proyecto de emisiones casi nulas: su cubierta y el uso de recursos íntegramente locales permite la reducción de residuos y desperdicios. Esto y el uso de arcilla cruda hacen de TECLA un ejemplo pionero de vivienda baja en carbono, sentando así las bases para la creación de hábitats sostenibles cada vez más eficientes.
«Tecla implica un cambio de paradigma en el campo de la arquitectura, acercándose a las necesidades de las personas y encontrando así una respuesta para la ‘Tierra’ dentro de la ‘tierra’. Una colaboración que se convierte en la unión entre la arquitectura empática y la aplicación de nuevas tecnologías», explica el arquitecto Mario Cucinella.
