Al parecer las tortugas mutantes no sólo aman la pizza, también son fanáticos de sus tocayos del Renacimiento
Miguel Ángel, Leonardo, Donatello y Rafael: las cuatro Tortugas ninja que hacen referencia a cuatro grandes figuras del Renacimiento, a un cuarteto de talentosos artistas cuya virtud sigue destacando al día de hoy. Pues resulta que, a pesar de que tanto los personajes infantiles como los artistas vienen de contextos muy diferentes, hubo un día en que sus caminos se cruzaron.
Miguel Ángel la tortuga y Miguel Ángel, el artista
Según los dibujos animados, Miguel Ángel y sus hermanos tortuga, vivían en una coladera de Nueva York, una de las capitales culturales del mundo. A pesar de que se supone que las tortugas ninja adolescentes mutantes dedican el mayor parte de su tiempo a combatir el crimen y a devolverle la paz a los ciudadanos de la Gran Manzana, hubo una tarde en la que Miguel Ángel decidió salir a la superficie para visitar el Museo Metropolitano de Arte, mejor conocido como el “Met” y conocer el trabajo de la persona que inspiró su nombre.
Fue un día en el año 2018, cuando la exposición de los dibujos del maestro del Renacimiento, Miguel Ángel, Michelangelo: Divine Draftsman and Designer, recibió a uno de los visitantes más populares y poco convencionales que ha tenido: Miguel Ángel, la tortuga ninja. Según lo documentado por la cuenta oficial del museo en Twitter, la tortuga gozó y analizó las decenas de obras, además de posar entre los bustos de mármol del artista y evaluó la obra más grande de la exposición: un dibujo de soldados de dos metros y medio de altura.
En las fotos también se le puede ver comparando sus extremidades reptiles con las pequeñas manos dibujadas por Miguel Ángel o mirando fijamente el retrato de bronce de Daniele da Volterra. Aprovechando que era el único en el museo, la tortuga ninja pasó un delicioso momento de tranquilidad con algunas de las otras obras del MET antes de que abrieran a todo el público.
Este curioso encuentro se pudo lograr gracias a NYC & Company, una empresa especializada en promover el turismo de Nueva York. Cuando se le preguntó a la tortuga adolescente cuál de las obras era su favorita, las autoridades de la compañía contestaron que la tortuga mutante disfrutó mucho de la escultura de mármol de Miguel Ángel, El joven arquero.
Ahora sólo esperamos el día en que Leonardo, Donatello y Rafael puedan tener la oportunidad de cultivar su intelecto al igual que su hermano.
