¿Obras de arte incomprendidas o monumentos al terror?
Las estatuas que decoran la vía pública pueden llegar a ser un verdadero regalo para los transeúntes, un respiro entre la urbanidad e inmediatez de la vida en la ciudad. Generalmente estos monumentos son encomendados por gobierno a prestigiosos escultores, para rendir tributo a un personaje histórico importante para la población, en otras ocasiones se trata de obsequios de los propios artistas o simplemente aparecieron de la noche a la mañana sin menor explicación.
Cual sea el caso, algunas esculturas en todo el mundo, no logran cumplir su objetivo estético y terminan aterrorizando a toda la población. Aunque existen pocos casos de este tipo de monumentos, a continuación realizamos un listado de las esculturas más horripilantes que existen.
Spiderman XXX
Sin mayores explicaciones, el artista plástico Eunsuk Yoo, creo una figura del superhéroe favorito de muchas generaciones: Spiderman, el cual adornaba una de las paredes de un centro comercial de Corea del Sur. A pesar de ser una escultura muy atractiva, además de contar con las proporciones adecuadas y una pose muy al estilo del superhéroe, mucha gente se quejo y lograron retirar la escultura de la fachada del edificio ¿el problema? Spiderman tenía una muy visible erección. Se dice que después de quitarla del centro comercial un hospital local la compro.
Selfie de hobbits
Una estatua en Ust-Kamenogorsk, Kazajstán, debía representar al escritor Abai Qunanbaiuli y al exiliado ruso Yevgeny Mikhaelis. Pero, se retiró rápidamente después de que los vecinos publicaron fotos de la escultura en las redes sociales, asociando el monumento con «dos hobbits que se tomaban una selfie». En realidad esta escultura no resulta realmente aberrante o aterradora, pero si bastante divertida. Vladimir Samoylov, el escultor de esta obra, argumento las fallas del trabajo diciendo que se hizo con mucha prisa.
Blucifer, el ¿adorable? caballito
Esta pieza se puede encontrar en el Aeropuerto Internacional de Denver, se trata de un monumental caballo de casi 10 metros de altura que pretende simbolizar el espíritu agreste del salvaje oeste. El problema con Blue Mustang, apodado «Blucifer», se concentra en su expresión sumamente agresiva y en sus demoníacos y rojos ojos, que en lugar de alumbrar, asustan a todos los nuevos inquilinos de la ciudad de Denver. Esta escultura fue comisionada por el aeropuerto en el año 2008 al artista Luis Jiménez. Desde su creación, los ciudadanos de Denver han pedido su erradicación.
I love Lucy
Dave Poulin es un escultor y fanático de la serie norteamericana llamada I love Lucy, cuya protagonista era Lucille Ball, una simpática comediante. En cuanto Poulin tuvo la oportunidad, intentó recrear a su ídolo en una gran escultura de bronce en tamaño natural. Este proyecto pretendía ser un perfecto homenaje para la actriz y comediante que marcó a varias generaciones en su ciudad natal de Ball en Celoron, Nueva York. Pero, para horror de muchos, la estatua que fue ubicada en el Parque Conmemorativo de Lucille Ball, resultó realmente lúgubre y aterradora, la imagen de la mujer bella y carismática distaba mucho de la apariencia de la estatua.
El come-bebés
Una fuente en Berna, Suiza es adornada con la perturbadora imagen de un ogro comiendo bebes como si se tratara de cualquier golosina, incluso a su lado, se encuentra una bolsa con bebés que devorara próximamente. Esta fuente se conoce coloquialmente como «fuente de comedor de niños», y se cree que fue creada aproximadamente en 1545 por Hans Gieng.
El fundador del Ku Klux Klan
Esta escultura es realmente repugnante desde cualquiera de sus aristas físicas o reflexivas, se trata de un supuesto homenaje al general confederado Nathan Bedford Forrest, quien fue miembro fundador del Ku Klux Klan y fue creada en 1998 por el escultor aficionado y ex abogado que representó al asesino de Martin Luther King, Jack Kershaw. Esta escultura además de ser un símbolo racista, carece de toda proporción, expresiones no naturales, terminados de baja calidad, entre muchísimas otras fallas.
Pelea de bebés
En la ciudad de Oslo, Noruega, se encuentra el parque Frogner hogar de la polémica estatua de Gustav Vigeland en la cual se puede apreciar a un hombre con varios espíritus en forma de bebés desnudos, algunos suspendidos en el aire con expresiones demoníacas. Seguramente el artista tiene una muy buena justificación para haber creado esta obra, aunque la mayoría de las personas que la ven no pueden dejar de pensar que probablemente ellos actuarían de la misma manera que el hombre si fuesen abordados así por esa pandilla de bebés diabólicos.
El problema de Oscar Wilde
A Conversation with Oscar Wilde, de Maggi Hambling, se encuentra en Trafalgar Square de Londres. Esta escultura ha sido motivo de muchas burlas, ya que la cabeza del famoso autor parece derretirse o emerger del mar como una especie de monstruo angustiado y cubierto de algas.
Satanás XXX
Hasta hace poco, esta estatua se encontraba a un lado de la carretera de Vancouver, Canadá. Era un diablo completamente rojo con un enorme pene erecto, nadie sabe quién lo hizo o quien lo puso en la carretera, simplemente apareció un día a la orilla de la vía. Al no conocer el origen y la intención (además de considerarlo ofensivo) las autoridades decidieron retirarlo, sin embargo, muchos ciudadanos se organizaron para hacer peticiones para llevar de vuelta la estatua del demonio.
Mozart el dementor
Para terminar este listado, se encuentra Il Commendatore, un fantasma de Mozart. Esta obra la terminó Anna Chromy, en el año 2000, la artista es famosa por crear misteriosas esculturas envueltas, pero esta es tan lúgubre que cuesta mucho trabajo pensar que esta estatua encorvada y sin rostro honra la figura de Mozart.
