Arte

La fascinante arquitectura de la pirámide de Kukulkán en Chichén Itzá

Uno de los sitios arqueológicos más impresionantes en México es Chichén Itzá, gracias a la mágica arquitectura de la pirámide de Kukulkán y el descenso de la serpiente emplumada, un efecto único que se puede apreciar sólo en el mes marzo y en septiembre de cada año.

Construida en el periodo posclásico, la pirámide de Kukulkán es un ejemplo de los conocimientos astronómicos de la cultura maya, además de ser una de las mejor preservadas al día de hoy.

Por ello, compartimos todo lo que debes saber sobre la mágica arquitectura de la pirámide de Kukulkán en Chichén Itzá.

Chichén Itzá es una de las zonas arqueológicas mayas más importantes y mejor conservadas en la Riviera Maya.

La arquitectura de Chichén Itzá

Una de las zonas arqueológicas mayas más importantes es Chichén Itzá, fundada alrededor de 525 d.C. en Yucatán. Caracterizado por edificaciones arquitectónicas del periodo posclásico, Chichén Itzá fue construido para el dios Kukulkán.

La arquitectura clásica maya de esta zona es un reflejo de los conocimientos astrológicos de esta cultura, en especial la pirámide principal, también conocida como Templo de Kukulkán. Con 24 metros de altura y 365 escalones, destaca por dos enormes cabezas de serpiente que hacen referencia a este dios.

La pirámide de Kukulkán fue construida para reflejar el descenso de la serpiente emplumada cada equinoccio.

¿Por qué es única la pirámide de Kukulkán?

La pirámide de Kukulkán es única, ya que esta fue construida de tal forma que cada equinoccio, el juego de luces y sombras por los rayos de sol permiten simular el cuerpo de una serpiente descendiendo del templo.

Para lograr este efecto, los mayas colocaron plataformas en su fachada, de forma que su sombra pudiera proyectarse sobre los laterales de la escalinata dando forma al cuerpo de este animal.

Este efecto simbolizaba la bajada del dios Kukulkán a la tierra, también conocido como Quetzalcóatl o serpiente emplumada, además de que este período coincidía con la llegada de lluvias en la zona.

Asimismo, era común que los gobernantes reunieran al pueblo en la explanada en los días de equinoccio para ver el descenso de Kukulcán, la serpiente emplumada que hablaría a través de ellos.

Cada 21 de marzo y 21 de septiembre, es posible observar el descenso de Kukulkán en uno de los costados de la pirámide.

¿Cada cuándo se repite el fenómeno de Kukulkán en Chichén Itzá?

El descenso de la serpiente emplumada en la pirámide de Kukulkán se lleva a cabo en todos los equinoccios, es decir, cuando el día tiene la misma duración que la noche.

Este fenómeno se produce dos días al año, el 21 de marzo y el 21 de septiembre, por lo que cada año, miles de personas se congregan alrededor de la pirámide en estas fechas para apreciar el espectáculo.

Generalmente, el efecto se va apreciando a partir de las 3:45 de la tarde, aunque es muy lento. Por ello, hay que esperar hasta las 4:30 o incluso a las 4:45 para ver el cuerpo de Quetzalcóatl perfectamente formado por los triángulos que perfilan su sinuoso descenso por la escalinata.

Cabe mencionar que, si se desea evitar la multitud de espectadores, es posible observar este fenómeno dos o tres días antes y después del 21 de marzo y 21 de septiembre.

Aunque el efecto se produce sobre la fachada de las cabezas de serpiente, es recomendable situarse con cierto ángulo para ver a la vez la fachada lateral, la cual proyecta la sombra de la serpiente emplumada.

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